viernes, 15 de noviembre de 2013

Harta

Esto es por todas esas veces que no grito, no me altero, parece que no me afectan las cosas, que paso de todo, que no reacciono, que todo me la resbala, que no me enfado, que no me cago en todos vuestros putos muertos, que no os mando a la mierda y que tolero todo lo que hagáis me parezca bien o no.

Últimamente no soy fan incondicional del ser humano, pero porque no tengo motivos. 
Siempre he pensado que la gente es buena por naturaleza, tal y como decía Rosseau, que hacer el mal es solo una mala forma de llevar a cabo buenas acciones, una forma errónea, pero día a día me demuestran, me demostráis, lo equivocada que estoy al pensar bien de todo el mundo.
Mi filosofía de vida es clara: "Vive y deja vivir" y "Vive y sé feliz", pero al parecer no la comparte la mayoría de la gente, y está claro que lo que se lleva hoy como filosofía de vida es: "Putea antes de que te puteen a ti", como una especie de prevención, una norma no escrita por parte de los pesimistas de este mundo supongo, ya que yo no la comparto. Y con ello no quiero decir que sea una optimista, ni mucho menos, no me considero ni una cosa ni otra, pero creo que debe haber un equilibro.

Al parecer, muchos se están preocupando hoy en día de tocarme las narices. No consigo un puto viernes irme feliz a casa para empezar con buen pie el fin de semana, y ya no sé si pensar si es porque los demás ansían joderme a mi o es cosa mía o del karma, que igual he hecho algo mal y aún no sé que es.

En fin, poco más quiero decir, no se me ocurre nada la verdad, pero para cerrar esto me gustaría citar una frase de una película que dice:

Las opiniones son como el agujero del culo: Todos tenemos uno y creemos que el de los demás apesta.

Que os jodan. Feliz fin de semana.

lunes, 28 de octubre de 2013

Secuencia II

INT. HABITACIÓN DE HOTEL. MAÑANA

Una habitación cuadrada, con las paredes de madera sin ningún tipo de decoración, aunque en una de las paredes hay una puerta de lo que parece ser un cuarto de baño. Con escasa luz, muy desordenada, con una cama de matrimonio, un escritorio, una silla y un espejo de cuerpo entero. A través de la única ventana vemos cómo el sol va iluminando ligeramente la habitación gracias al amanecer. Vemos la cama situada justo debajo de la ventana, deshecha, con una mesita de noche al lado que contiene unos cuatro cajones y encima de ella vemos un despertador, un teléfono y un pequeño flexo. En frente de la cama está situado el escritorio, con una maleta enorme, un flexo algo más grande que el que vemos en la mesita de noche, un calendario con el número 23 redondeado en rojo y una taza de té. De pie, con la espalda apoyada sobre la puerta de la habitación vemos una silueta de un joven de unos 21 años de edad, de estatura media, pelo castaño, espalda ancha y unos ojos color miel que hipnotizan con solo mirarlo. El joven está atento a la puerta del baño de la habitación.


LEO

(LIGERAMENTE NERVIOSO LLAMA A LA PUERTA DEL BAÑO). ¿Cuánto tiempo queda Laia? ¿Quieres que entre contigo? Estoy empezando a ponerme un poco nervioso...

(Acto seguido se abre la puerta y aparece una chica aún más joven que él, de unos 17 años de edad: Rubia, ojos verdes, delgada y de estatura media).

LAIA

(TAMBIEN ALGO NERVIOSA). Si, por favor, pasa conmigo Leo... Estoy muy asustada.

LEO

(INTENTANDO CALMAR A LA JOVEN). Tranquila cielo, pase lo que pase yo voy a estar a tu lado, ¿vale? No te preocupes más. Veamos le resultado y si hay que hacer algo lo hacemos, tú estate tranquila. (LE SONRIE PARA ANIMARLA).

(Ambos entran al baño y sobre la pila se ve un predictor usado. Se acercan juntos para ver el resultado, LAIA lo coge y lo mira. Sin decirle nada a LEO le abraza y empieza a llorar).

LEO

(PREOCUPADO POR EL RESULTADO). ¿Pero qué es? ¿Qué ha salido? Laia no me asustes así...

LAIA

(DEJA DE ABRAZARLE PARA MIRARLE). Es negativo cariño, ¡Es negativo!

(Ambos se miran, sonríen y se abrazan).

LEO

Buff... ¡Menos mal! (MIRA A LAIA). Te quiero muchísimo...

LAIA

(SONRIE). Y yo a ti Leo, ¡muchísimo! (SIGUE LLORANDO DE LA EMOCIÓN)

LEO

(TAMBIÉN SONRIE). Ahora vamos pequeña, vayamos a desayunar algo y aprovechemos la mañana.


(Laia se seca las lágrimas y ambos, cogidos de la mano, salen por la puerta del baño, cogen las llaves de la habitación y salen por la puerta).

domingo, 26 de mayo de 2013

Mi paraíso, mi país de las maravillas, mi reino perfecto, mi mejor sueño, mi mayor deseo, mi tesoro más preciado, mi octava maravilla del mundo, mi cielo, mi castillo de cuento de hadas... Todo eso y más eres tú, una vida contigo y sólo contigo. Cada fin de semana, cada día de descanso siento todo lo que pude sentir al principio de todo esto, y ya van casi 16 meses... 
Eres eso por lo que me desviví hace más de cinco años, eso que me derrumbó el mundo y eso que me lo ha vuelto a poner en pie... Seré sincera y te diré que no me enfadé ni te odiaba, pero no quería volver a saber nada de ti. Pero también te diré que cuando volvimos a hablar no solo me lo decía mi corazón, sino que mi cabeza también estaba de acuerdo, no tuve que hacer de tripas corazón, porque inconscientemente sabia que eres para mí. Y mi corazón y mi cabeza me dicen que eres eterno y de verdad.

lunes, 20 de mayo de 2013

Pequeños detalles que no se perciben al ojo humano


Hace un par de días me di cuenta de lo sencilla que puede llegar a ser la mente de un niño. Basta que digas que no haga algo para que ponga todo su empeño en conseguir hacerlo. ¿Y todo esto a qué se debe?

Desde pequeños nos educan de la mejor manera posible, dándonos cariño, protección, caricias, abrazos, besos, regañandonos cuando toca, enseñándonos lo bueno y lo malo...
Pero no nos lo enseñan todo: No nos advierten sobre las decepciones, las vivimos y aprendemos de ellas. No nos previenen de los errores, nos dejan cometerlos (a veces inconscientemente) para que estos nos enseñen. Y mil cosas más, pero una de las cosas que no nos enseñan, y la más importante en mi opinión es: No nos enseñan a sonreír, APRENDEMOS POR NOSOTROS MISMOS.
Esto me dice que si nosotros mismos hemos aprendido a sonreír, no necesitamos a nadie para poder hacerlo a lo largo de nuestra vida. Hemos aprendido nosotros solos, las personas van y vienen, pero a pesar de eso tu sonrisa debe permanecer presente en todo momento.
"Ríe y el mundo reirá contigo, llora y llorarás solo."

El otro día, cuando me encontraba en la parada del autobús pude apreciar a una nena de unos 4 años junto con sus padres, había llovido, y sus padres le repetían una y otra vez que no pisara los charcos, ya que llevaba manoletinas y enseguida le entraría agua, lo que podría conllevar a la pequeña a un futuro resfriado a la semana siguiente, pero al menor despiste de los padres aprovechaba la ocasión y chafaba desde lo lejos un charco no muy grande delante de ella, mientras le salía una pequeña sonrisa de alegría. No pude evitar sonreír ante tan sencilla pero tierna situación. 
Como bien he dicho, de pequeños basta que nos digan que no para que lo hagamos, y cogemos la manía de hacerlo por costumbre. Pero también es cierto que conforme crecemos, sin darnos cuenta, abandonamos esa manía y adoptamos la costumbre de nuestros padres: No chafar los charcos. ¿Por qué? ¿Por qué no seguimos pisando charcos a pesar de lo que nos digan? ¿Por qué seguimos las costumbres de todo ser humano de, en este caso, no pisar los charcos? ¿No somos seres humanos libres para hacer lo que queramos? Y lo mejor de todo, si como a esa nena nos proporcionaba un momento de felicidad pisar un charco, ¿por qué no seguimos haciéndolo ahora para proporcionarnos nuestra propia felicidad como hemos aprendido a hacer?

Yo sigo pisando charcos cuando la gente se despista.

domingo, 19 de mayo de 2013

Desvelarme con tus malos sueños.
Llorar con tus tristezas, esas con las que tu ni siquiera lloras porque eres mil veces más fuerte que yo.
Atormentarme con tus miedos.
Sufrir por tus problemas.
Entristecerme con tus tristezas.
Enfadarme con tu fuerza.
Pero también alegrarme con tus alegrías.
Sonreír con tu felicidad.
Ver el mundo con tus ojos.
Sentir tus logros como los míos.
Enmudecer con tus sorpresas.
Sonreír con tu boca.
Sentir con tu cuerpo.
...
Necesitar tu olor en mi ropa, tu presencia en cada uno de mis días, tu cuerpo en mi cama.. Cada momento, cada caricia, cada gesto, cada mirada, cada susurro, cada abrazo, cada beso, Cada silencio, cada palabra, cada suspiro, cada latido de tu corazón.

lunes, 13 de mayo de 2013


"Aquel que dijo que más vale tener suerte que talento, conocía la esencia de la vida. 
La gente tiene miedo a reconocer que gran parte de la vida depende de la suerte. Asusta pensar cuantas cosas se escapan a nuestro control. En un partido hay momentos en que la pelota golpea el borde la red y durante una fracción de segundo puede seguir hacia adelante o caer hacia atras. Con un poco de suerte sigue adelante y ganas, o no lo hace y pierdes."

miércoles, 8 de mayo de 2013

Californication

Querida Karen, si estás leyendo esto significa que he encontrado el valor para mandártelo, bravo por mi. No me conoces muy bien pero si me permites, tengo tendencia a repetir una y otra vez lo duro que me resulta escribir, pero esto es lo mas difícil que he tenido que escribir nunca. No existe una manera fácil de decirlo , así que simplemente lo diré: He conocido a alguien, fue una casualidad yo no lo estaba buscando no lo planee fue la tormenta perfecta, ella dijo una cosa yo dije otra, cuando me di cuanta quería pasar el resto de mi vida en mitad de aquella conversación. Ahora tengo la sensación en mi entrañas de que puede ser ella, esta completamente chiflada de una forma que me hace sonreír, extremadamente neurótica y exige un mantenimiento exhaustivo. Ella eres tú, Karen, esa es la buena noticia, la mala es que no se como estar contigo ahora, me acojona, porque si no estoy contigo inmediatamente tengo la sensación de que nos perderemos ahí fuera, este es un mundo enorme y malo lleno de vueltas y recovecos, y falta para parpadear para que desaparezca el momento, el momento que pudo cambiarlo todo, no sé lo que hay entre nosotros y no puedo decirte porque habrías de saltar al vacío por alguien como yo, pero hueles tan bien, como el hogar, y haces un café excelente, eso también importante, verdad?. 
Llámame, Infielmente tuyo, Hank.

lunes, 6 de mayo de 2013

Secuencia I


INT / CAFETERIA / MAÑANA

La cafetería, iluminada por los rayos de luz que entran a primera hora de la mañana, cuenta con tres mesitas con cuatro sillas cada una, una barra acompañada de cinco taburetes y una máquina de tabaco, al fondo a la derecha se ven dos puertas, una con un aseo dibujado y otra con una señal de “prohibido pasar”. De fondo suena la radio con una canción alegre y en una de las paredes vemos una tele encendida pero  con la voz muy bajita, de forma que solo se oye la radio. Las paredes son moradas, a excepción de una de ellas que tiene un mural artístico pintado que ocupa toda la pared. La cafetería está aún vacía, pero oímos ruidos procedentes del almacén.
Vemos a Zaida, una muchacha de unos 25 años de edad, morena, alta e increíblemente atractiva, arrastrando cuatro cajas apiladas llenas de botellas de refresco. La joven está haciendo un sobreesfuerzo ya que no puede con las cajas. Las mueve del almacén a la barra y comienza a vaciar las cajas y colocar las botellas en la nevera detrás del mostrador. En este momento Zaida esta como ausente, pensando en sus cosas y guardando las botellas de forma automática, mirando el reloj que hay colgado en la pared que marca las 8:45. Aún. Tiene cara de sueño y está pensando que aún le quedan más de siete horas de jornada.
Pasada una media hora sigue sin haber nadie en la cafetería, Zaida ha acabado sus tareas de preparación, su jefe no ha llegado todavía y ella está sentada en un taburete, aburrida, apoyada en la barra y haciendo zapping en la televisión. Vuelve a mirar el reloj y se queda pensando en la monotonía de su día a día. Empieza a frustrarse y sentirse desanimada.
A las 12:10 Zaida sólo ha servido dos cafés y un par de tostadas a una mesa en toda la mañana, y es entonces cuando aparece su jefe por la puerta, un hombre de unos 40 años que lo único que hace es meterse en su despacho, que está dentro del almacén, y jugar al ordenador. Cada vez que Zaida ve este comportamiento aprieta los dientes, cierra los puños de rabia y se siente impotente, sobre todo si piensa que lleva 6 meses sin cobrar porque su jefe no hace nada por conseguir dinero. Esta vez Zaida no puede resistirse y a las 12:25 de esa misma mañana se planta en el despacho de su jefe, se quita el delantal, se lo tira sobre el estudio y se marcha dejando su trabajo. Estaba harta de trabajar por nada. Zaida, había decidido cambiar su vida. Ahora solo se ve una cafetería vacía con música alegre de fondo. 

miércoles, 24 de abril de 2013

Un sueño es el acto de dormir.
Un sueño es el acto de representarse en la fantasía de alguien, mientras duerme, sucesos o imágenes.
Un sueño son estos mismos sucesos o imágenes que se representan.
Un sueño es las ganas de dormir.
Un sueño es una cosa que carece de realidad o fundamento, y, en especial, proyecto, deseo, esperanza sin posibilidad de realizarse.

Un sueño es el día que he pasado contigo, una vida contigo y todo lo que implique un "nosotros".
Gracias por hacer de mis sueños una realidad. TeAmo.

martes, 23 de abril de 2013

Llorar. Llorar de felicidad.
Sentir. Sentir que nadie podría darme jamás lo que tu me das.
Atrapar. Atrapar cada palabra, cada beso, cada mirada, cada abrazo, cada gesto y no soltarlo, guardarlo todo en esa vieja caja que me regalaste, bajo llave, para que nunca pueda escapar de ahí.
Suspirar. Suspirar al verte sonreír, al ver que eres feliz y que lo único que necesitas para ser feliz es que este yo contigo, parece que con eso te basta, y eso a mi me hace vivir.
Vivir. Vivir cada momento como si no hubiera un mañana, como si este fuera nuestro último día en el mundo y vivirlo contigo y para ti.
Querer. Quererte hasta sangrar, hasta que duela de una forma casi insoportable, un dolor que no hayas experimentado antes.
Morir. Morir cada vez que me miran esos ojos, cada vez que me acarician esas manos, cada instante que te tengo a mi lado.

lunes, 22 de abril de 2013


Que una canción pueda salvarte la vida. O que un poema parta el mundo en dos, como un cuchillo una manzana. O que encuentres la felicidad en un plato de lentejas. O que ames una clavícula con toda tu alma. O que puedas perderte en unos ojos más profundamente que en una noche. 
No es lógico que nos pase, pero nos pasa. 

miércoles, 17 de abril de 2013

2008

Si a veces hablo de ti no creas que aun te quiero, es solo porque recuerdo lo que contigo sufrí.
Si a veces hablo de ti y ves que brillan mis ojos no creas que estan llorosos, es que mi risa es así.
Que no, que no, que nunca sabrás si te sigo queriendo o te dejé de querer.

martes, 16 de abril de 2013

Y allí estaba ella, tan tranquila, viendo pasar las horas con una revista, al sol, y disfrutando del maravilloso día veraniego tumbada en el suelo del parque como si fuera su propio jardín, cuando de repente apareció él con una rosa y se quedó mirándola sin decir nada. Ella alzó la mirada y allí lo encontró, con la misma cara de bobo con la que ella se enamoró de él.

lunes, 15 de abril de 2013

Risto Mejide

Cuando sepas de mí, tú disimula. No les cuentes que me conociste, ni que estuvimos juntos, no les expliques lo que yo fui para ti, ni lo que habríamos sido de no ser por los dos. Primero, porque jamás te creerían. Se reirán de tu pena y te empujarán a seguir, que es la forma que tienen los demás de hacernos olvidar.

Cuando sepas de mí, tú calla y sonríe, jamás preguntes qué tal. Si me fue mal, ya se ocuparán de que te llegue. Y con todo lujo de detalles. Ya verás. Poco a poco, irán naufragando restos de mi historia contra la orilla de tu nueva vida, pedazos de recuerdos varados en la única playa del mundo sobre la que ya nunca más saldrá el sol. Y si me fue bien, tampoco tardarás mucho en enterarte, no te preocupes. Intentarán ensombrecer tu alegría echando mis supuestos éxitos como alcohol para tus heridas, y no dudarán en arrojártelo a quemarropa. Pero de nuevo te vendrá todo como a destiempo, inconexo y mal.

Qué sabrán ellos de tu alegría. Yo, que la he tenido entre mis manos y que la pude tutear como quien tutea a la felicidad, quizás. Pero ellos... nah.

A lo que iba.

Nadie puede imaginar lo que sentirás cuando sepas de mí. Nadie puede ni debe, hazme caso. Sentirás el dolor de esa ecuación que creímos resuelta, por ser incapaz de despejarla hasta el final. Sentirás el incordio de esa pregunta que jamás supo cerrar su signo de interrogación. Sentirás un qué hubiera pasado si. Y sobre todo, sentirás que algo entre nosotros continuó creciendo incluso cuando nos separamos. Un algo tan grande como el vacío que dejamos al volver a ser dos. Un algo tan pequeño como el espacio que un sí le acaba siempre cediendo a un no.

Pero tú aguanta. Resiste. Hazte el favor. Háznoslo a los dos. Que no se te note. 

Eso sí, cuando sepas de mí, intenta no dar portazo a mis recuerdos. Piensa que llevarán días, meses o puede que incluso años vagando y mendigando por ahí, abrazándose a cualquier excusa para poder pronunciarse, a la espera de que alguien los acogiese, los escuchase y les diese calor. Son aquellos recuerdos que fabricamos juntos, con las mismas manos con las que construimos un futuro que jamás fue, son esas anécdotas estúpidas que sólo nos hacen gracia a ti y a mí, escritas en un idioma que ya nadie practica.

Dales cobijo. Préstales algo, cualquier cosa, aunque sólo sea tu atención.

Porque si algún día sabes de mí, eso significará muchas cosas. La primera, que por mucho que lo intenté, no me pude ir tan lejos de ti como yo quería. La segunda, que por mucho que lo deseaste, tú tampoco pudiste quedarte tan cerca de donde alguna vez fuimos feliz. Sí, feliz. La tercera, que tu mundo y el mío siguen con pronóstico estable dentro de la gravedad. Y la cuarta, -por hacer la lista finita-, que cualquier resta es en realidad una suma disfrazada de cero, una vuelta a cualquier sitio menos al lugar del que se partió.

Nada de todo esto debería turbar ni alterar tu existencia el día que sepas de mí. Nada de todo esto debería dejarte mal. Piensa que tú y yo pudimos con todo. Piensa que todo se pudo y todo se tuvo, hasta el final.

A partir de ahora, me conformo con que algún día sepas de mí, me conformo con que alguien vuelva a morderte de alegría, me basta con saber que algún día mi nombre volverá a rozar tus oídos y a entornar tus labios. Esos que ahora abres ante cualquiera que cuente cosas sobre mí.

Por eso, cuando sepas de mí, disimula.

jueves, 11 de abril de 2013

- Mírala, así se siente realmente el mar. - le dijo la fotógrafa cuando la vio posar por primera vez para las fotos. Al mismo tiempo se giró a mirarle a él y notó que no hacía falta decir nada. - Que estúpida soy.. Te digo que la mires para ver con que pasión siente el océano y tú la sientes a ella con una pasión 10 veces mayor. Se nota que realmente la quieres muchacho. -

miércoles, 10 de abril de 2013

No sé de donde lo saqué, pero me encanta este texto:

-"Te voy a poner un ejemplo complicado, paso de simplismos, me gustan las verdades enmascaradas en juegos de lógica, al alcance de todo aquel que tenga un buen ego, u orgullo, como queráis decirlo.
-"Verás, puedo establecer un símil entre el amor de mi corazón y la desintegración de los núcleos de uranio-235 radioactivo, ¿vas captando la idea?, si nos apoyamos en que N=N0 * e^(-h*t), verás que por mucho que pase el tiempo, mi amor, es decir, el uranio, nunca se anulará, es más, con el paso de los años exponencialmente será más difícil que desaparezca,puede reducirse a lo más mínimo, pero no extinguirse".
-Entonces..., según eso, cada vez me quieres menos, ¿no?- preguntó ella suspicazmente
-Incorrecto, porque mi constante de desintegración radioactiva(h), no es negativa, sino positiva.- explicó.

martes, 9 de abril de 2013

Wonderland without Alice.

Llega un punto en nuestra vida en el que nos sentimos como Alicia en el país de las maravillas: Todo nos parece irreal, lo comúnmente pequeño es grande, y nosotros nunca tenemos el mismo tamaño más de 12 minutos. 
Al principio da miedo, estremece, pero finalmente nos acabamos dando cuenta de lo maravilloso que es ese mundo de locos, liebres y reinas de corazones. 

domingo, 31 de marzo de 2013

Que mi suerte es estar contigo y la de tenerte conmigo, que ahora se que ni mil vientos ni mil ríos, nada terminará la aventura que vivimos.

No sabía lo que era magia hasta que te cruzaste en mi camino.
El beso más dulce, el abrazo más querido..

TeAmo.

viernes, 15 de marzo de 2013

A veces solo queremos escaparnos, aunque sea únicamente con la mente, de forma espiritual. Olvidar todo por un único instante, ausentarnos de nuestros pensamientos diarios y buscar un momento de relax, aunque sea solo un micro segundo, una parte de nuestro tiempo muy pequeña. 
Incluso las personas más felices lo necesitan, por muy bien que les vaya todo en la vida, siempre hay algo malo. Como dirían algunos "una de cal y otra de arena".

Como ya dije una vez, todos sabemos escribir textos cuando estamos mal, textos en los que nos desahogamos y soltamos toda la mierda que tenemos dentro de nosotros en ese momento. Y sé que no es tan fácil escribir cuando estas bien, cuando tus problemas son minuciosos, chiquitines y pasan desapercibidos. Sé que pocas personas son capaces de expresar la felicidad, y me incluyo, porque la felicidad no es una palabra, sino un sentimiento, miles de motivos que te hacen sonreír, y cuando estas triste pocas cosas encuentras que te hagan sonreír. 

Deberíamos intentarlo, deberíamos saber escribir algo que sea capaz de transmitir a los demás lo que sentimos nosotros... Inténtalo y dime si funciona.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Y no hay mayor fuerza que la de quererte, ni mayor tristeza que solo pensar en que podría perderte.

martes, 26 de febrero de 2013

domingo, 17 de febrero de 2013

Por que te extraño, desde aquel noviembre cuando soñamos juntos el querernos siempre,
y me duele, este frío noviembre cuando las hojas caen a morir por siempre...
Noviembre sin ti es sentir la que la lluvia me dice llorando que todo acabó.
Noviembre sin ti es pedirle a la luna que brille en la noche de mi corazón.